lunes, 26 de enero de 2009

Los Siete






























En tan solo una sola tarde...
... Pereza... sin ganas de hacer nada ni cumplir con mis obligaciones, únicamente con deseos de dormir, descansar, abandonarme al placer de no hacer nada...
... Gula... comer por comer, por matar la ansiedad o aumentarla, hasta límites insospechados, sin hambre, sólo por distraer la mente, por ocultar el nerviosismo entre montañas de comida...
... Soberbia... excesivamente orgullosa de mí misma y menospreciando a los demás, sabiéndome capaz (o al menos, creyéndomelo firmemente) de hacer cosas que los demás ni imaginan, ni pueden...
...Avaricia... obsesión por tenerlo todo, por obtener el mejor resultado, por quererlo, por desearlo por encima de todas las cosas...
... Lujuria... como vía de escape a la tensión, cuando la gula no es capaz de satisfacerme, lo que sea con tal de abandonarme nuevamente al placer de...
... Envidia... de lo que los demás conseguirán y yo no, de sentir que nunca obtengo lo que deseo mientras que los demás lo consiguen sin aparente dificultad, mostrando ante mis ojos el resultado que deseo, haciendo que lo envidie cada vez más...
... Ira... como explosión final, en la hora de la cena, al no soportar la espera, ni la tensión, ni a las caraduras que me rodean; aún siento esa ira recorriendo venas y arterias, llegando al corazón, haciéndome estallar, sin poder controlarme... perdiendo el control... dando su merecido a quien lo necesite, a quien lo está pidiendo a gritos, voy a desahogarme por completo dejando fluir libremente la ira...
... Soy una mujer pecadora...

























1 comentario:

Mj dijo...

jejeje, como lo sabes, qué me han contao de la tinia en un niño de 30 kilos???