viernes, 26 de agosto de 2011

Pieza a pieza...


Pieza a pieza, la gente desaparece de tu vida. Al principio, nada más desaparecer, siguen ahí, en el recuerdo, y entonces sus piezas empiezan a desvanecerse una a una.
WALLACE, Daniel: El Rey de la Sandía.

Nos cruzamos, y le basta media centésima de segundo para reconocerme y saludarme. Y sonrío, y saludo, pero no sé quién es. Ahora he recordado su nombre, pero no recuerdo sus apellidos. Sus piezas se desvanecen una a una. Como las de muchos otros. Inevitablemente.