De arte y de prácticas

Estoy de prácticas. Y me encantan. Soy tan feliz cuando estoy en el hospital que cada día me convenzo más de que mi carrera debería desarrollarse completamente en un hospital y eliminar la teoría por completo. Ya el año pasado el cirujano general que se encargó de darme prácticas de Patología Quirúrgica General me dijo que las cosas que no se olvidan son las que se aprenden en prácticas. Es una verdad como un piano de cola.
Ahora estoy rotando por prácticas de Pediatría y esta semana he estado con un médico profesor que me ha encantado. No sólo se nota que sabe muchísimo y que ha acumulado mucha experiencia, sino que intercala entre sus lecciones otro tipo de charlas que me han hecho reflexionar. Una de sus grandes frases de hoy ha sido preguntarnos: "¿Qué es el arte?"
Ante la cara de asombro de todos nosotros (incluyéndome a mí, éramos tres alumnos en prácticas con él) ha respondido él mismo: "Aquello capaz de emocionar a otra persona; aquello que hace un ser humano y que despierta emociones en otro ser humano". A continuación ha expuesto que si un individuo se emociona viendo "Gran Hermano" eso sería arte para él. Para quien haya leído mi anterior post sabrá que para mí el cine es arte. Pero también otras cosas.
Si el arte es aquello que produce emociones en una persona, además del cine, la música es para mí arte. Cada persona econtrará arte en una canción distinta, puesto que lo será aquella que le produzca algo. Para mí, en este momento, La Manic, de Bruno Pelletier, es arte. Su voz y su forma de interpretar y sentir la música me hacen llorar, es una canción preciosa y triste, me conmueve, me emociona. Gracias a YouTube y al blog de cierta chica conocí el musical Notre Dame de Paris y llegué hasta este maravilloso artista canadiense este verano. Sí, artista, porque a mí me emociona su música. Y me alegro muchísimo de haber descubierto a una de las voces masculinas más bonitas del mundo, después de Juan Carlos Barona (o lo que es lo mismo, el Fantasma de la Ópera en español). Si existe la perfección, es Pelletier en esta canción. Si existe arte como capacidad de conmover, es esta canción.